MUJERES

                                                              *Ken Sánchez

Ocho, un ocho de marzo, una fecha muy importante en el calendario, el calendario marcó un ocho viernes en que las mujeres son recordadas como el ser supremo de éste jardín milenario (mundo) que nos toca habitar lleno de sueños que hacemos para una mujer que es nuestra madre, de ella nacemos para divagar sin destino ni horizontes, algunas veces sin ser comprendidos cruzamos valles y montes lleno de sierpes y maldades.

      NEGRA

Eres

como un poema

escrito a carbón,

eres como una taza

de café

recién servido

lleno de aroma

y perfume, eres.

Desde lo más profundo de un sentimiento que no podemos ver sino con la experiencia de uno que ha vivido muy profundamente al lado de una mujer a quien ha amado con todo los desvarío; por eso perdemos todo y nada y hasta a veces olvidamos que estamos vivo, por eso alguno poeta mencionara en una de sus frases que decía: “escribo para saber que aún vivo”, así, por una mujer los mejores poemas y también la mejor canción desgarrador y aterrador de idas y venidas tiempos.

Hay un sin número de poesías dedicadas la mujer, aquí reproducimos un soneto de Mariano Melgar:

LA MUJER

No nació la mujer para querida,

por esquiva, por falsa y por mudable;

y porque es bella, débil, miserable;

no nació para ser aborrecida.

No nació para ser sometida,

porque tiene carácter indomable;

y pues prudencia en ella nunca es doble,

no nació para ser obedecida.

Porque es flaca no puede ser soltera,

porque es infiel no puede ser casada,

por mudable no es fácil que bien quiera.

Si no es, pues, para amar o ser amada,

sola o casada, súbita o primera,

la mujer no ha nacido para nada.

Los artistas de  ayer y hoy y siempre han rimado, han plasmado en grandes cuadros los mejores retratos de la mujer, ya sea al óleo, al pastel u otra técnica, igual los escritores han narrado en cada página de sus poesía o tal vez novelas, mujeres que se han convertido en heroínas de grandes libros  y hermosos cuadros, de una mujer trajadora y maltratadas y violentadas; madres solteras abandonadas e olvidadas, una mujeres enredados en filas de la delincuencia condenadas bajo la sombra del odio y, también engarras de la prostitución comiendo desprecios bajo el techo de la injusticia, todas ellas van mis mil parabienes en un día que hacemos de ellas un  agasajo muy propios de cada uno.

Por los caminos de mil enredos, uno ve diferentes tipos de cuadros, en cada página de los diarios pasamos los ojos por cada palabras de las noticias tan aterradoras que nos deja exangües, pero así es este mundo de mil penurias que no puede terminar sino de mil maldades que nos atormenta  cada día.

Escuchamos por las noticias, mujeres que llegan a denunciar maltratos por parte sus esposos: golpeadas a malsana, quemadas con agua hervida o, también con otros materiales incandescentes, u otras casos tienen que recoger su cadáver de la morque, o vemos por la tv que han sido asesinadas prostitutas, en fin noticias por doquier hacen alarde de la mujer, ¿qué hacemos para calmar tanta maldad?...  ¿Por qué tanta crueldad para un poco de existencia?

¿Por qué tanta crueldad en éste valle hermoso?

¿Por qué somos tan animalescos?

¿Por qué nos enmarañamos con la mujer, si decimos que la amamos con toda la vida,

con toda nuestras fuerzas,

amamos más que a nuestras madres,

más que a Cristo,

si ellas son nuestro universo,

nuestra agua que calma nuestra sed

el mar que conduce nuestra barca,

la flor de nuestro jardín,

la rosa que está en nuestro pecho,

es el altar de nuestras almas,

es la escultura del más hermoso valle,

es el mejor poema,

es el sol que brillan,

es el alimento,

es la luz que guía nuestros pasos,

es todo y nada,

nada y todo de nuestro ser,

es la Reyna… del santuario de mi espíritu…

así aclamamos a los vientos de la sinrazón de la mentira sin razón.

A veces van por las calles aquellas que distribuyen migajas de cariño por un puto cobre y para aplacar su hambre de aquellas almas sin consuelo:

2

A ti

mujer

que correr

en busca

como calmar tu sed

aplacar tu hambre.

Mujer

que correr

llevando hambre

en tu vientre

soñando con la libertad

acostada en lecho injusta

condenada

a la prostitución.

Caminas

llevando la rabia en tu alma

cubriéndote de andrajos

asomada

bajo el techo del desprecio.

A ti

mujer

te escribo

porque eres presencia

y realidad.

                  

Los festejos fueron hasta que los gallos hacían llegar sus cantos de madrugada anunciando la llegada del albo día nuevo, un nuevo día de un maltrato más hacía a las mujeres, las comisarías llenos de denuncias por agresiones, algunas entrando a sus centros de trabajo, otras su dando los muslos de su desvergonzado trabajo y de vejaciones, o tal vez otras abrigados por el frío de una esquina esperando algún parroquiano que deje un sencillo y tomarse un caldo y abrigarse la madrugada; pues así es el cada día de cada día de todo los día y todo los días del año.